Y escribiendo me levanto,
y entre versos me atraganto,
aun sumida entre llantos
a los que la noche me ha llevado,
Me deslizo en mi cama,
observando la mañana,
de blancos rotos,
de negras almas,
Veo un pajaro volando
a través de la ventana,
no es mas que mi sombra,
que perdida se delata,
Qué hay entre mis piernas,
que ni tus rondares me despiertan,
qué hay entre entre mis piernas,
que la noche me ha llorado,
De infinitas sombras,
de abrazos simulados,
del adiós que pronuncian mis labios,
cuando tu alma a mi cuerpo empieza a encadenarse.
No sé si nos veremos,
no preguntes, que ni miedo siento,
entre mis piernas esta el secreto,
y en tus brazos, en tus brazos mi lamento.
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